La sala 7 de la Galería de los Uffizi acoge la famosa obra maestra de Gentile da Fabriano (sobre 1370 – 1427), la Adoración de los Magos. La obra es considerada una de las obras maestras del Gótico internacional. Fue realizada para Palla Strozzi, uno de los más grandes humanistas de la Florencia del siglo XV.
Su pintura poética y fabulosa, el gusto por la línea y un uso incomparable de los elementos decorativos lo llevaron a la cúspide de la escuela italiana de la época, recibiendo encargos de grandísimo prestigio. Al visitar Florencia, entró en contacto con el naciente Humanismo en el arte y, aunque sin renunciar al estilo propio, inició una consciente transición entre el decorativismo tardogótico y la esencia renacentista.
El tema de la Adoración de los Magos permitía a los artistas representar a la riqueza y la cultura de sus clientes. Al mismo tiempo, la presencia de numerosos detalles daba al artista la oportunidad de mostrar su habilidad.
La formación de Gentile, se cree que fue en la escuela sienesa y que pudo haber sido aprendiz de algún pintor toscano. Comenzó a pintar dentro de la tradición fabrianesa, y no se puede excluir una formación más lejana a la vista de la complejidad y la riqueza de sus obras posteriores, en Milán o en Venecia que eran los grandes centros artísticos del norte de Italia. Desde joven empezó a trasladarse por los centros de las Marcas y Lombardía.
El 6 de agosto del año 1420 está documentado en Florencia, donde se inscribió Gentile, en el Arte dei Medici e Speziali (21 de noviembre de 1422) como «Magister Gentilis Nicolai Joannis Massi de Fabriano pictor, habitator Florentiae in populo Sancte Trinitatis».
En Florencia abrió un taller donde pintó la que será su pieza más famosa, la Adoración de los Magos, llamada Pala Strozzi. El retablo fue encargado para la capilla familiar de los Strozzi en la iglesia de la Santa Trinidad de Florencia.
La atmósfera donde se mueven los personajes es fabulosa, elegante, típica del Gótico internacional. En la obra no hay un solo núcleo, sino el observador tiene que poner sus ojos en varias escenas. Los Magos son representados en el curso del viaje, hasta la llegada y la adoración de Jesús.
El uso del oro – aplicado en hojas delgadas, luego grabadas a mano libre – hace la obra rica y brillante. El marco también es rico y particular, da a la obra una forma especial que la hace única.
La obra está construida en perspectiva simbólica, en la que los elementos procuran crear una ilusión de profundidad (el establo y la mesa colocados en diagonal, por ejemplo), el tamaño de los personajes en la lejanía... Una pintura que usa la narración continua con varias escenas figuradas en el cuadro. Desplegó en esta obra el cortejo de los Magos, formando en segundo plano diversos focos secundarios de la acción, no unidos entre sí.
Natividad, detalle del lado derecho de predela del retablo
Los trucos del género permiten ver la obra desde diversos puntos de vista, sobre los que el espectador es invitado a detener la mirada y a analizar cada detalle en particular en momentos sucesivos.
Huida a Egipto, detalle central inferior del retablo
Gentile es realista y minucioso en su representación de los detalles. Las texturas, especialmente de las telas, está muy lograda. Se trata de un pintor medieval, y ello se aprecia en el rico cromatismo o en el uso del dorado de tradición bizantina. No obstante, hay en él rasgos que prefiguran el renacimiento: intenta dar volumen a sus figuras, modelarlas, y hacerlas expresivas.
Actualmente se pone énfasis en su moderno tratamiento de la luz y también por haber usado el dibujo libre en sus estudios y esbozos.
Bibliografía : http://www.uffizi.org/es/
Fonte: El Poder del Arte
Nenhum comentário:
Postar um comentário